Ayer estuve en El Tablero, el programa dirigido por la gran Laura Arroyo, para debatir sobre diversos temas de actualidad: los casos Aldama y Koldo, las estrategias de Lawfare, cada vez más normalizadas por la derecha; la vergonzante política del PSOE respecto a Palestina, pues España sigue siendo un puerto de transporte de armas para Israel -pese a que Sánchez dice lo contrario-; la lucha del pueblo gallego contra la contaminante multinacional ALTRI; las absurdas declaraciones de Macarena Gómez y Aldo Comas sobre los testimonios anónimos de mujeres que sufren acoso y violencia -hubo un debate interesante en torno a ellas y a los supuestos «linchamientos» que sufren los hombres por parte de las feministas-.

Finalizamos hablando de política internacional y abordando el fin del «gobierno semáforo» en Alemania, liderado por los socialdemócratas: Olaf Scholz disuelve el parlamento tras perder su moción de confianza y habrá elecciones el 23 de febrero. Unas elecciones en medio de la inestabilidad política y económica que atraviesa el país, con los nazis de Alternativa por Alemania subiendo como la espuma (se estima que puedan sacar entre un 19% o 20% de los votos, siendo segunda fuerza).

Fue un placer compartir mesa de debate con Marilyn Dos Santos (periodista), Arantxa Tirado (Politóloga) y Josu Estarrona (Senador por EH Bildu). Os dejo parte de mi intervención sobre el Lawfare:

Aproveché la ronda de titulares para mandar todo mi apoyo al Coletivo de Vítimas CES (Academia sem assédio) que están luchando contra los casos de acoso laboral y sexual que tienen como centro a Boaventura de Sousa Santos y su entorno en el Centro de Estudos Sociais de Coímbra (CES). Todo mi apoyo para su lucha y por denunciar con tanto coraje la violencia que se produce en el ámbito académico:

Aquí podéis ver el programa completo:

Este ha sido mi último «Tablero» del año 2024. Así que aprovecho para dar las gracias en especial a Laura Arroyo y a Rober Saavedra por todo el trabajo que hacen y el tesón y cuidado que le ponen. También a Víctor Redondo, a Sasi Alejandre, a Huáscar Sologuren y a las demás compañeras que hacen posible El Tablero. Nos vemos el año que viene. Y «last but no least», gracias siempre al hermano y gran poeta Giovanni Collazos, pues fue él quien me metió en este fantástico lío televisivo.